miércoles, 28 de septiembre de 2011

MANTENER EL EMPLEO MUNICIPAL.

Los gobiernos locales estudian cómo reducir el capítulo I de cara a los presupuestos de 2012 · Los alcaldes quieren buscar el consenso para afrontar decisiones impopulares y que influyen en los servicios. Con este titular el Diario de Sevilla publica una noticia que hace referencia al problema que atraviesan algunos Ayuntamientos y que como es normal, Burguillos no esta al margen.

Los próximos meses serán decisivos en los ayuntamientos sevillanos para buena parte de su personal que, en los últimos diez años se ha multiplicado hasta crecer más de un 50%. La compleja situación financiera en la que se hallan los consistorios obligará, admiten sus responsables políticos, a plantear y aplicar algunos recortes en este sentido, pero a los que están abocados por los planes de saneamiento, la necesidad de afrontar deudas y pagos pendientes. Ya se está negociando con la oposición en algunos casos, porque el capítulo I, el de Personal, es el que se lleva la mayor parte del presupuesto, más de lo que se ingresa en algunos casos, haciendo la situación insostenible a medio plazo. Los alcaldes prefieren ser discretos al tratarse de un tema espinoso siempre y en el que prefieren buscar el consenso. Hay municipios en los que el Ayuntamiento es la primera industrial local y se quiere evitar a toda costa echar al personal a la calle en un contexto de crisis generalizada. Donde no se plantean despidos puros y duros, hay varios enfoques que se repiten para intentar nadar y guardar la ropa de alguna forma. En algunos casos se está estudiando una rebaja del número de horas de trabajo y del sueldo por tanto, con la garantía de mantener los puestos.
La mayoría de los gobiernos locales descarta un Expediente de Regulación de Empleo (ERE). La Junta, que debe autorizarlos, no está por la labor hacerlo, porque empieza a haber sentencias en otras comunidades de España que ponen en cuestión su legalidad en el caso de una administración pública. Pero sí se apunta a expedientes temporales de empleo, esto es, que la gente deje de trabajar durante un tiempo cobrando el paro con algún complemento que pueda aportar el Consistorio hasta que pueda salir del atolladero. El alcalde de Burguillos, por ejemplo, ha apuntado esta posibilidad, pero sin nada en firme, a expensas de negociaciones con sindicatos y oposición. Es el mismo modelo que se aplicó el mandato pasado a los trabajadores de la empresa de desarrollo de Palomares, parte de los cuales quedó en el paro y otros se integraron en diferentes áreas del Ayuntamiento, que les adeuda varias nóminas.

Noticia completa: Diario de Sevilla.

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